Hemos celebrado todos los cumpleaños acumulados de verano y septiembre, así que ha sido una avalancha de cumples celebrados de tres en tres. Gracias a los abuelos, abuelas y madres (y las que no han podido venir) que nos han acompañado; juntos (alumnos, familias y profe) hemos pasado un rato muy agradable y entrañable; nuestros hijos crecen casi sin darnos cuenta. Cuatro añitos...
Vamos inaugurando rincones de actividad; estos días le ha tocado a la pequeña biblioteca de clase, que a la vez es un rincón de tranquilidad: vemos los dibujos, las letras, reconocemos alguna, y hasta algunos leen alguna palabra...
Me lo ha preguntado alguna madre y sí, es verdad; en la Asamblea de inicio de la jornada algunos niños-as me preguntan si voy a estar con ellos para siempre...
Os dejo unas cuantas fotos.